Las lluvias que afectan a diferentes zonas del país dejaron cientos de calles y rutas dañadas, las cuales en muchos casos sorprendieron a los conductores que se encontraron con sus autos bajo el agua.
Lo que sucede el día después de estos hechos, es que los reclamos a las compañías de seguros se multiplican y es cuando empiezan a revelarse muchas preguntas. Lo más común es que muchas personas no conozcan en detalle sus pólizas y no estén al tanto de los daños que la aseguradora puede cubrir.
En primer lugar, para que el seguro cubra daños por inundación a tu auto, es necesario contar con una cobertura amplia.
Ésta cubre daños a consecuencia de inundaciones, colisión, vuelco, rotura de cristales, incendio, huelgas, fenómenos naturales, entre otras. A diferencia de la cobertura limitada que sólo cubre daños a terceros, robo, gastos médicos y asesoría jurídica.
Sin embargo, no todas las aseguradoras manejan los mismos términos, por ello, si vas a contratar una cobertura amplia debes fijarte muy bien en todas las condiciones, ya que, en algunos casos se puede presentar lo que llaman agravamiento del riesgo, lo que significa que la persona puso en riesgo el auto intencionalmente, y la compañía podría no pagar por esto.
En caso de siniestro, se recomienda dejar el auto donde está y llamar a tu aseguradora para que un ajustador evalúe la situación. No olvides tener a la mano tu número de póliza y mantener la calma.